miércoles, 9 de marzo de 2016

La Casa Verde


Allá en medio de los fantasmas de la casa verde
Dejamos atrás el formalismo y la interrogante
Entre ruinas del ayer 
nos devoramos el uno al otro con hambre de naufragio
Mientras que espectros y sombras 
se llenaron de envidia por su falta de piel

Tus ojos saltaron de placer cuando ingrese hasta tu rivera
La respiración un reloj de arena
Mientras iban muriendo tus suspiros 
En medio de un remolino de ropa 
Que se fue haciendo innecesaria por el calor

Al llegar la erupción 
volvimos a pies descalzos a la monotonía
Las miradas tenian un brillo distinto
Un no sé que...
Dialogo que queda atrapado para siempre
Junto a los viejos fantasmas de la casa verde


Humberto Roa Aguilar

@poetandante

1 comentario:

  1. hermosa y misteriosa experiencia poeta, las casas cobran vida cuando son habitadas por el amor...abrazos

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